Colorful ya no era un
polluelo era un ave Fénix que acaba de renacer, las plumas eran hermosas más
intensas he perfectas que mostraban un brillo como si estuviera ardiendo, en
ese momento unos pasos se escuchaban así que agarre mi cobija y tape a
Colorful.
-¡Hijo!- grito mi
mama.
-si mama- respondí,
pero cuando tape a mi ave me puse enfrente, ya que se empezaba a escuchar como
estaban abriendo la puerta, así que me puse enfrente de él.
-Oh, ¿aquí estas?-
dijo mi madre levantando una ceja.- ¿Qué tienes atrás de ti?
-nada- dije algo
nervioso.
Mi madre se quedó
quieta mirándome, como que tratando de leer mi comportamiento o mis ojos,
admito que mis manos estaban temblando, y me empezó a dar calor. Mi madre me
hecho una última de miradas, me miro de arriba a abajo, respiro profundo…
-baja, necesito que me
ayudes con algo en la cocina, ¡por favor!- comento mi madre, quien al casi
salir vio mi cuarto que estaba hecho un caos por lo que había hecho.
Mi madre cerró la
puerta y se fue, respire profundo y la cobija se cayó mostrando a mi querido
coroful con sus impresionante figura he plumas hermosas.
-Bien, tengo que ir
ayudarme a mi madre, quédate aquí he- dije mirándolo a los ojos. Al igual que
él, pero el solo parpadeo y creo que dio a entender que había entendido.
Rápidamente baje las
escaleras y le fui ayudar a mi madre.
-¿Qué necesitas
madre?- pregunte.
-Ayúdame con la
segunda ventana, hay que lavarla- dijo mi madre señalando la esponja.
La verdad no estuvo
tan difícil, ya que me apure lo más pronto posible para ver a mi Colorful he
pensar una manera de esconderlo mientras se me ocurre que hacer con él ya que
con ese tamaño mi mama no dudaría en sacarlo de aquí.
-por cierto- dijo mi
mama mientras aventaba el agua hacia la
ventana y se escurriera el jabón.- ¿Cómo ha estado el pequeño polluelo?- me
miró fijamente.
-Am, bien mama, muy
bien-conteste algo nervioso.
-¿Nunca lo dejaste o
buscaste su nido verdad?-
-Am, Am, Am- tartamudeaba.
-MMMMM-
-Am, ¿me lo puedo
quedar?- dije mirando hacia mi ventana y luego voltee.
Mi madre solamente se
quedó callada y comenzó a cerca el espejo con una hoja de papel de periódico.
-¿Te vas hacer responsable del?- me miro con seriedad.
-¡SI!,! Si MAMI!- dije
con entusiasmo.- Bueno ya termine.
Dije terminado de echarle
agua al vidrio y secándola, solamente termine de ponerla en su lugar, así que
rápidamente subí las escaleras, me fui a mi cuarto, cerré mi puerta con seguro.
Pero en aquel ligar donde estaba Colorful ya no estaba, voltee por todos los esquinas
he lugares de mi cuarto pero no estaba lo único que había dejado antes de irme
era mi ventana abierta así que supuse que se fue. Pero en ese momento vi el
reloj que se encontraba en mi ropero al lado de mi cama, aparecieran que eran
las 11:30 solamente tenía 20 minutos para estar preparado y la verdad el tiempo no alcanzaba así que
rápidamente me cambie rápidamente, ya que bañarme no me alcanzaría, en lo que
me bañe y todo ya eran las 12:45 así que no importaba cuanto me apresurara si
de todos modos calculando no llegaría a la primera clase, sin embargo me acorde
de aquella vez que me dijo aquella mujer extraña que el “tatuaje o marca” que tenía
era de bruja así que decidí inventar un conjuro.
Tiempo para de nuevo
Que yo promuevo los hilos
Horas, minutos y segundos
Deténganse por un
momento
En lo que llego a mi
destino.
Mi marca brillo, sentí
una sensación extraña, un gran poder sentí en mis manos como bolas blancas y
luego desaparecieron, he todo se detuvo lo digo porque una paloma voló de mi
ventana por lo que se espantó, pero antes de marcharse y alejarse se detuvo al
momento que brinco y expandió sus alas. Estaba asombrado pues eso significa que
tengo súper poderes o mejor dicho soy mago como Harry Potter o como la película
de aprendiz de brujo, no sé cuánto tiempo funcione mi hechizo así que me cambie
lo más que pude y me fui en mi bici pedaleando con mucha velocidad. En cuanto
llegue a la escuela el tiempo regreso a la normalidad, todos como siempre
jugando, platicando, dando besos, chocándolas con sus amigos y así como si nada
hubiera pasado, Pero la chica que me
encontré ese día en la clases de natación, iba acompañado con un chico he iban
cargando cosas para pintar la verdad, creo que con eso me daban la pista que
iba al club de pintura, así que rápidamente fui a hablarle, pero a medida que
avanzaba escuchaba algunas chicas he chicos sobre un estudiantes nuevo de
intercambio aunque no les preste mucha atención la verdad, me importaba más saber
sobre esa chica.
-¡¡OYE!!! ¡¡OYE!!-
Gritaba con todas mis fuerzas.- ¡¡OYE!!! OYE CHICAAAA!
En ese último grito me
escucho y me voltio a ver con una mirada de enojo, he comenzó a caminar
nuevamente.
-¡OYE!- Grite
nuevamente pero solamente, se detuvo pero no voltio a verme solamente se quedó
quieta a espaldas.
-¿Qué quieres?-levanto
la voz.
-Lo siento, no quiero
molestar, solamente quiero saber tu nombre- dije muy cautelosamente y respirando
para contener mí aliento.
-Y, ¿para qué quieres
saberlo?- comento, mientras comenzaba a voltearse para verme.
-yo, yo- nuevamente
comencé a trabarme y agache la cabeza.
-No sé si darte mi
nombre sea buena idea, pero no se…- se quedó callada.- está bien te lo diré no
siento vibras extrañas de ti, mi nombre es Bethany.
Comento y escuche irse
pues sus tenías hacían ruido al chocar con las piedras, de ahí me comenzó a dar
intriga aquel chico nuevo que tanto estaba escuchando.
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