ZODIAC: UN POLLUELO ABANDONADO Y EL MAL PRESENTADO
-¡YA ES HORA!- grito
mi madre desde la escalera.
-¡¡Bien ya voy!!-
respondí, mientras acomodaba las cosas en la mochila.
Rápidamente me puse mi
tenis y una gorra para cubrirme del sol.
-bien ya estas listos,
vámonos- dijo mi padre mientras estaba saliendo a encender el carro
Mi padre comenzó es encender el coche.
-¿¿si llevas todo??-
pregunte mirando a mi madre.
-SI, claro- contesto
Para ser honestos mi
madre usualmente olvidada la comida cuando se trataba de picnic, así que le
dije a mí me traje unos panes, jamón, mayonesa, atún, etc... En cuanto al
recorrido era lo mismo trayecto solo que esta vez tenía mis audífonos y el
viaje no se me iba hacer tan tenso o pesado en este caso. Cuando llegamos al
bosque buscamos el lugar más hermoso, en
pocas palabras la que a mi mama le gustara, asi que después de caminar unos
minutos por fin escogimos un lugar creo
que cerca de un lago ya que se escuchaba un riachuelo.
-Bien haremos el picnic aquí- dijo mi madre mirando
alrededor.
-ok- contestamos mi
padre y yo.
-Oye, hijo podrías ir
por leña para el fuego- dijo mi madre mientras extendía la manta.
-Pero no se suponía que era solo un picnic-pregunte,
pero mi padre en eso me sorprendo con unos malvavisco que tenía escondidos en
su chamarra.- bien iré por la leña-
-gracias hijo-
contesto mi padre o bueno eso alcance a escuchar.
Pero no se me sentía
muy raro porque tenía una sensación rara, no había ninguna visión o aquella
sensación de hormigueo cuando conjure un hechizo sino todo lo contrario.
-SIMON- un susurro.
-¿Debo estar
loco?-dijo entre dientes,-Ma…- me interrumpí pues cuando volví a ver ya no
estaban atrás de mi pensé que no me había alejado de ellos lo sufriente pensé
que solo había caminado 11 pasos, y que
no estaba tan lejos de ellos, pero desaparecieron.
-Simón- nuevamente ese
susurro.
Comencé a espantarme,
un frio recorrió toda mi espalda, me dio a dar calor y comencé a temblar.
-¡! SIMON!!- esta vez
no fue un susurro sonó como alguien gritando en mi oreja.
-¿QUIEN ERES!!!-
GRITE.- ¿COMO SABES MI NOMBRE?.
-YO SOY EL MAL QUE AS
DESPERTADO- la voz se escuchaba sonora y fría.
-EL-MAL-QUE-ACABO…-
dije entre líneas asustado.
-SI- la voz era más
intensa.- que acaso no leíste la primer advertencia??.
-De que advertencia
estás hablando??-pregunte apenas si podía elevar mi voz.
-ok-
En eso aquel libro que
estaba en mi mochila fue rápidamente arrebatado, sentí como estaban abriendo mi
mochila y no solos eso aquella presencia no sé si me toco el hombro pero el
miedo he adrenalina se apodero de mi me petrifique sentí como mis miedo se
hacían realidad.
-oh, lo siento- la voz
sonó burlona.- déjame leerlo por ti lo
que dice este verso.
Veía como alguien podía
darle vueltas a las hojas del libro, aunque no podía ver sus manos o rostro.
-Interesante, veo que
aún no as descifrado el resto de las páginas, solo tiene un pequeño verso de advertencia,
¡ESTUPENDO!-
Nueva mente una ráfaga
de aire me cubrió, el miedo y mis temores volvieron a dejarme petrificado.
-Podría matarte con un
solo golpe o chasquido-. Un silencio se
apodero cuando dijo eso.- Pero no lo are, no así. Tengo cosas que destruir,
cosas que matar y un ejército que debo resucitar- la voz se oyó más tenebrosa.-
en ese momento el libro cayó al suelo y poco a poco aquella cosa comenzó a
revelarse ante mis ojos.
Sus manos eran largas
pero no tenía carne más que puros huesos afilados como cuchillas, piernas no
tenia, el pecho era carne podrida con hoyos mostrando los hueso, el cuello
igual, pero la cara era una especie de bestia, dientes afilados como
chuchillos, ojos rojos como la sangre, sin orejas ni pelo, solo carne, podrida
he igual unas partes enseñando los huesos.
-Antes de que grites,
permíteme presentarme Silent deaht- dijo con una voz aguda he siso una
referencia.-ADIOS nos volveremos aver.
Comento mientras se
desvanecía, no podía gritar, no moverme aun, el terror y el miedo se estaba
desvaneciendo poco a poco, hasta que por fin me pude mover, todo alrededor
comenzó a tornarse raro, un viento me sacudió, me tape los ojos para que nada de polvo o piedras me lastimaran mis
ojos y cuando por fin el viento se quitó vi que estaba en lo profundo del bosque.
-Pero como es que
llegue aquí- dije con voz nerviosa, aunque no sé si lo que vi era un
sueño.-Debo regresar con mis padres.
En ese momento di la media vuelta para ver si
hallaba un camino pero justo iba a dar el primer paso, escuche un sonido como
de un pájaro abandonado. Trate de controlarme ya que aún me sentía débil y
nervioso. El sonido venia de un árbol que estaba de lado izquierdo creo que era
un roble. Quite las hierbas que estaban por ahí he en la base del árbol había
un pequeño polluelo sin plumas me imagino que apenas recién nacido, lo tome y
lo puse en mi playera como una especie de bolsa lo abrase, era cálido pero no trate de no hacer tanto esfuerzo para
no lastimarlo. Pero había algo más una inscripción
en ese mismo árbol.
-SIIIIMOOOON-
-HIJO, ¿DOOOONDE
ESTAS?-
Se escucharon unos gritos así que no pude leer
la descripción, fui rápidamente a buscar esas voces ya que eran mis padres.
-¡maaamaaa!, ¡paaapaaa!,
¡AQUÍ ESTOY¡-Grite y empecé a correr mientras agarraba mi playera para que el
polluelo no se cayera.
-ya vamos- los dos
gritaron.
Me quede quieto ya que
el polluelo sentía que se me estaba resbalando he también ya estaba algo
inquieto, a los pocos segundos ya comenzaba a inquietarse. Trataba de
acomodarlo o arrullarlo pero en eso llegaron mis padres.
-oh, gracias a dios
que estas bien- comento mi madre acariciándome y casi me abrasa cuando la
detuve.
-pero, ¿Qué tienes?-
dijo algo sorprendida y preocupada.
-perdón, pero encontré
a este pequeño y no pude devolverlo, no encontré su nido- dije algo preocupado.
Pero justo con mi
padre iba a decir algo, una tormenta comenzó a soplar, mi padre me tomo de la
mano al igual que mi madre y comenzamos ir al picnic, subimos las cosas en pocas lo que estaba en la canasta, cuando
empezamos a sentir las primeras gotas no apagamos el fuego, agarre el pequeño
bolso que me hice, en cuanto todos estábamos arriba arranco el coche. Cuando por
fin estábamos lo bastante alejados aquel escalofrió me volvió a recorrer todo el
cuerpo, mi corazón comenzó a latir rápidamente,
mis manos he piernas comenzaron a temblar, mire al polluelo he el estaba igual
asique trate de cubrirlo con mis dos manos sin lastimarlo y se sintiera
protegido. Pero era imposible. En eso solo escuche la misma voz de aquel sujeto
o demonio diciendo << EMPIEZA LA DIVERSION>>
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